¿Por qué el evento interno está en el corazón de la comunicación interna? Antes de responder a ello, hay que empezar por el principio: ¿Qué es la comunicación interna? La comunicación interna tiene como objetivo unir a los empleados, crear vínculos y un sentimiento de pertenencia a la empresa. Todas las acciones de comunicación interna se dirigen a este objetivo.
Pero, ¿qué mejor manera de unir eficazmente a tus equipos en torno a unos valores comunes que a través de un evento interno?
Descarga esta guía con 10 Eventos Corporativos que cambiarán la vida en tu empresa
En el sentido más amplio, un evento interno es un momento, una ocasión que reúne a todos o a una parte de los empleados y que contribuye a reforzar su sentimiento de pertenencia.
Ceremonia de bienvenida, fiesta de despedida o de llegada, cumpleaños… ¡Las oportunidades para crear eventos internos no faltan!
En este artículo, te explicaremos por qué deberías hacerte con ellos sin duda 🚀
El evento está en el corazón de la estrategia de comunicación interna.
Las publicaciones de comunicación interna facilitan a los empleados el acceso a la información. Fomentan la comunicación interfuncional y permiten que los empleados de diferentes departamentos se conozcan entre sí.
Pero el evento interno es un momento único de encuentro y de intercambio real. Ofrece oportunidades para los intercambios informales entre equipos. Como resultado, refuerza los vínculos entre los empleados, el espíritu de equipo y la cultura corporativa.
Para los comunicadores o directores, hay varias buenas razones para organizar un evento interno:
El evento es la piedra angular de la comunicación interna. Cada evento es un momento clave para reunir a los equipos.
Por lo tanto, al comunicador interno le interesa multiplicar estas ocasiones y, en cuanto a la publicación, organizar su calendario editorial en torno a estos eventos (anuncio del evento, recordatorios, publicaciones en directo, comentarios de fotos o vídeos sobre el evento, etc.).
De hecho, el evento interno tiene muchas ventajas:
En la comunicación interna hay que distinguir entre un evento y un acontecimiento especial.
Los acontecimientos corresponden a una categoría muy específica de los eventos: los grandes acontecimientos, los eventos importantes.
Se refiere a eventos muy formalizados: convención, seminario de equipo… Son momentos clave del año en los que se reúnen los equipos y requieren una logística importante. Todo está preparado de antemano, con muy poco margen para la improvisación.
Sin embargo, el evento corporativo no se limita a estos actos anuales. Cómo hemos visto anteriormente, todo es un acontecimiento. El evento interno se refiere a cualquier ocasión contextualizada y limitada en el tiempo que sea favorable para una acción que nos permita unir a través de la comunicación interna.
Son momentos cotidianos que se convierten en verdaderos recuerdos. También conocidos como rituales o hábitos, estos son los eventos informales que crean union entre los equipos.
El evento se crea cuando no lo esperamos. Se compone de pequeños gestos de los compañeros, reuniones informales en torno a un café, por ejemplo, para celebrar un cumpleaños o la marcha de un miembro del equipo.
Todos estos momentos son una importante fuente de inspiración para animar y renovar tu comunicación interna. Es precisamente la misión del responsable de comunicación interna captar y sublimar estos momentos cotidianos para transformarlos en rituales y, por tanto, en acontecimientos por derecho propio.
Los rituales son todos los momentos compartidos que son signos de identificación con una empresa y sirven como puntos de referencia para los empleados.
Son ocasiones que se repiten a lo largo del tiempo, con distinta frecuencia según su naturaleza. Por ejemplo, la pausa para el café es un ritual diario. El afterwork suele celebrarse semanal o mensualmente. La fiesta de despedida o de llegada es contextual. Y la fiesta o comida de Navidad es un ritual anual.
¿Qué tienen en común todos estos rituales?
Se tratan de marcas de tiempo en la vida de la empresa. A través de estos momentos, los valores de la empresa se expresan y permiten unir a los empleados.
Los rituales fomentan el sentido de pertenencia entre los empleados. Por eso es un elemento clave del compromiso.
Lo bueno de los rituales corporativos es que hay muchos. ¿Podemos convertirlos en eventos y, si es así, cómo?
Aquí tienes algunos ejemplos de rituales que puedes convertir en eventos:
El evento interno está en el centro de la comunicación interna. De hecho, la comunicación interna pretende «obtener resultados» porque es la materialización de la cultura corporativa y el vector del sentimiento de pertenencia de los empleados.
Los acontecimientos internos no son necesariamente momentos espectaculares. Muchos momentos de la vida de una empresa son preciosos y tienen la fuerza de un acontecimiento. El comunicador interno debe entender y comprender los rituales para transformarlos en eventos unificadores.
¿Quieres mejorar tu comunicación interna? Háblanos de tu proyecto y descubre cómo Steeple está mejorando la vida laboral de más de 250.000 empleados.